El Tiempo

Naturalmente tampoco el Amor…,

Una de las cosas que no se puede comprar con dinero es más tiempo para vivir.

Quiero decir que cuando a uno le toca palmarla, se muere y listo. Actualmente dado el estado de la medicina y la normal durabilidad de nuestros cuerpos, podemos aspirar a vivir entre 80 y 100 años, tal vez y en el supuesto de que la medicina avance mucho, se alcancen a vivir razonablemente en buen estado 120 o 150 años.

Puedo imaginar que la humanidad si todo va bien y no se cae en ningún abismo, con paciencia y un bizcocho, logrará importantes avances, antes (actualmente) impensables. Investigaciones científicas en genética, células madre, clonación, ADN y el Cerebro como gran desconocido, posibilitaran la fusión de la biología con la tecnología. Diseñaremos y fabricaremos nuestras propias capacidades y cuerpos al detalle, para que aguanten el gran salto, los viajes espaciales y la colonización del Universo.

El hombre desde que es hombre, aspira a convertirse en Dios. A ser creador de otros mundos. Tal vez el misterio de la creación sobre la tierra sea este. Quizás nosotros mismos seamos los que desde algún lugar evolucionado, como ángeles cercanos a Dios, depositamos aquí nuestra propia semilla.

Somos el Alfa y el Omega. Realizados y fabricados a nuestra imagen y semejanza, evolucionamos desde el principio de los tiempos, hasta el fin del universo y de todas las cosas que contiene. La historia del Universo somos nosotros mismos. Es nuestra propia historia y deseamos conocerla, para volver a empezar.

Al margen de nuestra evolución, si nadie lo remedia, habremos de morir, sin prisa y sin pausa, incesantemente.

Ya sabéis que si la semilla es buena y muere, se multiplica y da frutos a cientos.

..., Vive en el universo.